Hotel Hacienda San Agustin de Callo Lasso

Reseña de un crítico de hotel

Recientemente tuve la oportunidad de disfrutar de una escapada romántica en la Hacienda San Agustín de Callo, un lugar mágico que combina la rica historia inca con la modernidad. Desde el inicio, fui recibido con un cálido canelazo que nos preparó para la experiencia. El almuerzo, servido en el restaurante Inca, fue una delicia; el locro destacado realmente me sorprendió, aunque entiendo que la variedad de opciones es limitada en una hacienda. El entorno es, sin duda, el protagonista, con vistas impresionantes del volcán Cotopaxi y un ambiente que te invita a relajarte. Además, la visita guiada por el lugar fue fascinante, ya que explorar los restos arquitectónicos y la rica herencia cultural fue un deleite. Sin embargo, la atención del servicio dejó algo que desear, especialmente al inicio, donde experimentamos una espera innecesaria. A pesar de esto, la calidad del lugar y su historia hicieron que esta escapada fuera memorable. Definitivamente lo recomendaría para quienes buscan una experiencia diferente en los Andes.